Marta Billordo - Lidice Capeluto - Carina Juan - Carmen Noriega
El frío de invierno que propicia
la floración de las violetas se aferra a los días para ofrecernos los últimos
pimpollos en octubre. Entonces, elegimos un color: el violeta que identifica a
las causas feministas, que pinta nuestras luchas de género y sale a la calle a
pedir por igualdad, por justicia, por los derechos negados. Violeta como el
nombre de la enorme cantautora que amamos, en el año de sus cien octubres,
siempreviva, voz de arpillera bordada en lana. Violeta una vez más, para
reunirnos en el arte, para construir sentidos, convidar ideales y ofrendar
pasiones.
Los
temas que atraviesan el trabajo de las artistas de Violetas de octubre son tan vigentes como ancestrales, son las
preguntas nuevas que todas las mujeres que las preceden se hicieron: sobre la
identidad que rebosa los límites del cuerpo impuesto, sobre los vínculos de la
piel y el poder intenso de los sentidos, sobre la fragilidad del nido más
íntimo y la fuerza sagrada que lo sostiene.
Marta Billordo borda
los pies y las manos de sus personas queridas, retratados sobre papel con
puntadas de hilo satinado. Y así como nos trae a los suyos, nos acerca sus
nidos de vellón aceptados por los pájaros como propios. Su labor de tejedora se
continúa en el afán de las aves que trenzan con los picos, con las patas,
briznas de hierba entre las hebras.
En
sus fotografías iluminadas, Lidice Capeluto trae la presencia
concurrente de muchas mujeres: la que posa para sus tomas, la que alguna vez
portó las prendas de época que viste, la que mira desde el lente de la cámara.
Todas las mujeres que sus imágenes encarnan, con luz de farol, como señales en
la sombra.
Los bastidores que enmarcan los
bordados de Carina Juan, no son sólo
aros que sostienen las telas tan cuidadosamente trabajadas. Hablan de su oficio
diario y consecuente de descoser lo cosido y abordar con valentía las costuras
de lo acostumbrado para dar puntadas nuevas. Con oficio y sensibilidad
estética, Carina borda y desborda la vida.
Carmen Noriega ofrece en sus piezas un
mapa de los vínculos afectivos que no obvia los silencios, los temores y las
ausencias. Sus mil formas de repararlos con hilo y aguja, la minuciosidad con
que elige los materiales y la delicadeza con que los interviene, como quien
acaricia, laten en sus amorosos capullos.
Cada año, la vida
aflora de un púrpura profundo, oscuro, va abriendo su corola violácea y se
despereza en reflejos rosados, lilas, vibrantes.
Así construyen estas mujeres, en color
violeta, desde el último peldaño del arco iris.
Viviana Debicki
Marta Billordo
Lídice Capeluto
Carina Juan
Carmen Noriega
Violetas de Octubre
del 7 al 28 de octubre en
Centro Cultural Tierra Violeta
Gracias Vivi!!!!!!!!
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